Cuando se intenta cuidar la línea una de las cosas que más se hecha de menos son los dulces. Casi todos los dulces son alimentos muy calóricos y hay que reducirlos muchísimo cuando se intenta perder peso.
Pero hacer dieta no tiene que ser una tortura: ¡existen alternativas que pueden hacer que la dieta sea mucho más llevadera! La receta de hoy es un postre super ligero y muy resultón. Tendrás la completa sensación de estar tomando chocolate sin el cargo de conciencia de estar boicoteando tu dieta.
Ingredientes (para 6 raciones)
- 2 tazas de leche desnatada
- 2 cucharadas soperas bien colmadas de cacao en polvo puro desgrasado
- Edulcorante al gusto
- 6 láminas de gelatina
Elaboración
- Hidratar las láminas de gelatina sumergiéndolas en agua fría durante 5 minutos.
- Poner la leche a calentar al fuego, añadir el cacao, el edulcorante y mezclar bien.
- Retirar la leche del fuego e incorporar la gelatina hidratada y bien escurrida. Remover hasta que se disuelva.
- Servir en moldes y meter en la nevera unas 8 horas.
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