¿Todos los años la Navidad te pasa factura? Por mucho que lo intentas, cuando acaban las Fiestas siempre acabas cogiendo unos kilos. La ropa te aprieta, te sientes pesada e incómoda…

2021 puede ser diferente. El secreto para poder pasar las Fiestas con éxito es tener un buen plan. Te voy a dar unas recomendaciones para que planifiques tus Fiestas y puedas empezar el año sintiéndote ligera y llena de energía.

No te dejes llevar

El peor error de estos días es pensar “De perdidos al río, ya que me estoy pasando, me paso a lo bestia y ya lo arreglaré luego”. Ese es un pensamiento muy habitual, y es muy, muy importante ser capaz de evitarlo. La verdad es que si te pasas mucho vas a engordar mucho. Después te vas a sentir mal. Probablemente tendrás molestias digestivas, te sentirás muy pesada, toda la ropa te apretará y estarás incómoda. Luego vendrá el arrepentimiento y la tristeza: “Por qué habré comido tanto, no tengo remedio, soy un desastre”. Y pensar en adelgazar todos los kilos que hayas cogido se te va a hacer muy cuesta arriba…

Hay otra forma de hacerlo. Vale, es Navidad y seguro que hay mucha comida rica por todas partes. Seguro que algo te vas a pasar. Pero ¿qué pasa si en lugar de pasarte un montón te pasas solo un poco? Si consigues frenarte un poco seguro que engordarás mucho menos. Eso significa menos disgusto. Eso significa menos que arreglar después. Si te lo propones, incluso puedes pasar las Fiestas sin engordar. ¡De verdad, se puede!

Limita los excesos a los días clave

Lo peor de estas fechas no es la cena de Nochebuena o la comida de Año Nuevo, lo que realmente te hace engordar es que a primeros de diciembre ya hayas comprado el primer roscón, o que tengas veinte cenas con tus compañeros de trabajo, con tus amigas del cole, con tus primos… o que te pases tres días después de Navidad comiendo sobras (¡y polvorones!). Lo que realmente hace que en estas fechas se coja tanto peso es que alargamos las Fiestas a muchos más días de los que realmente son Fiesta.

Si consigues limitar los excesos a los días clave, luego tendrás mucho menos que lamentar. Te propongo que intentes probar estas tres cosas:

  1. Si tienes cenas o comidas pre-Navidad, no te las tomes todas como si fueran “la última cena”. No hace falta comer y beber como loco para disfrutar de la compañía de las personas que quieres.
  2. Intenta cocinar menos cantidad para los días de Fiesta. Sabes que al final siempre sobra. Trata de ajustar un poco mejor este año. Y si sobra, que los invitados se vayan con un tupper debajo del brazo. O congela, dentro de dos meses el cordero de Año Nuevo te sabrá a gloria.
  3. No pongas la consabida bandeja de turrones en mitad de tu salón. Compra lo justo y pon los dulces de Navidad en la mesa sólo los días de Fiesta. El resto del tiempo guárdalos en un armario fuera de la vista. Y si este año no toca celebrar ninguna Fiesta en tu casa, no compres nada, ya tendrás ocasión de probar algún dulce cuando vayas a la casa de tus familiares. ¡Las tentaciones cuanto más lejos mejor!

Planifica un menú ligero para los días que no son Fiesta

Haz un poco de dieta los días entre medias de las Fiestas. Eso te ayudará a bajar el peso que hayas cogido en las comilonas y también te hará sentir más cómoda y ligera.

Basa tu alimentación de esos días en comer mucha verdura, fruta, legumbre cocinada sin grasa, pescado blanco y lácteos desnatados. Estos son los alimentos que te permiten sentirte saciada con pocas calorías.

Utiliza muy poco aceite para cocinar y evita los dulces, los fritos, los embutidos, las carnes grasas y el alcohol. Estos son los alimentos que aumentan mucho las calorías de la dieta, ¡hay que limitarlos al máximo!

Te propongo dos días como ejemplo.

Día 1:

  • Desayuno: kiwi, café con leche desnatada, tostada de pan integral con tomate.
  • Media mañana: café con leche desnatada y manzana
  • Comida: judías verdes, pescado blanco al horno con una patatita asada y naranja
  • Merienda: yogur desnatado con un puñado de cereales integrales sin azúcar
  • Cena: bowl de ensalada con quinoa y huevo cocido y yogur desnatado

Día 2:

  • Desayuno: pera, taza de leche desnatada con avena y canela, té
  • Media mañana: plátano y té
  • Comida: ensalada verde, lentejas estofadas con verdura, mandarinas
  • Merienda: tostada de pan integral con queso de Burgos desnatado y mermelada light
  • Cena: puré de verduras, pechuga de pollo a la plancha y yogur desnatado

Compensa los excesos

Los días en los que hay celebraciones, te recomiendo que trates de compensar comiendo muy ligero el resto del día.

Por ejemplo, el día de Nochebuena, que sabes que vas te vas a pasar en la cena, trata de hacer una comida a medio día que sea muy ligera. Puedes tomar una gran ensalada con muchas verduras, una lata de atún al natural y unos pocos garbanzos.

El día que la celebración es a medio día, como la comida de Año Nuevo, puedes compensar el día cenando solo un puré de verdura y un yogur desnatado.

En el desayuno y entre horas puedes tomar fruta y lácteos desnatados.

Otra forma de aligerar los excesos es aumentar un poco el ejercicio. Aprovecha que vas a tener tiempo libre y dedica un rato a moverte. Hacer una buena caminata la mañana de Nochevieja, o la tarde-noche de la Navidad, te ayudará a quitarte de en medio las calorías de algunos trozos de turrón. En la época en la que estamos necesitamos sacar la artillería pesada. ¡Muévete y gasta todo lo que puedas!

Pésate con frecuencia

Este es un punto clave para conseguir no engordar. Lo peor que puedes hacerte es hacer el avestruz. Esconder la cabeza para no ver lo que pasa no va ha hacer que dejes de engordar.

¡La báscula tiene que ser tu aliada, no tu enemigo! Si ves que los números suben, puede servirte de estímulo para hacerte reaccionar a tiempo.

Tampoco es bueno que te vayas al otro extremo y te peses cada media hora. Eso no te aporta nada y te puede suponer un desgaste emocional.

Pésate aproximadamente un día a la semana, en las mismas condiciones y sobre la misma hora. Utiliza este momento de pesarte para pararte a pensar. ¿Has engordado? Necesitas cuidarte más. Repasa qué has hecho en los días anteriores y piensa qué puedes hacer mejor en los próximos días. ¿Te mantienes? Enhorabuena, estás haciendo las cosas bien. Sigue cuidándote y no bajes la guardia.

Reflexiones finales

La Navidad es la época del año en la que es más fácil aumentar de peso. Las personas que tienen tendencia a engordar pueden coger entre 4-7 kg sin pestañear. Luego perder ese peso es muy difícil. De hecho, mucha gente no puede quitárselo del todo, y año tras año los kilos se van acumulando.

Si consigues pasar estas Fiestas manteniendo el peso que tengas a día de hoy es un gran logro. Para conseguirlo tienes que cuidarte, pero te aseguro que el esfuerzo merece la pena. Es menos sacrificado pasar las celebraciones navideñas con un poco de control, que luego tener que hacer meses de dieta estricta.

¿Quieres que te ayude a disfrutar de las celebraciones sin engordar? Juntas podemos diseñar un plan personalizado que se ajuste exactamente a tus necesidades.

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